Cada lugar tiene su impronta, su aroma, su esencia, su plaza, ese personaje que marcó historia, esa canción que te lleva a viajar en la memoria. En el Oeste de Montevideo esto se vive de forma especial, ya que sus habitantes entienden que el lugar no es solo un espacio referencial, es una zona donde la rebeldía se convierte en organización, en emprendimientos y en acciones colectivas como sinónimos de cultura y tradición.  

Decir Oeste, es decir trabajo, esfuerzo, dedicación, participación, reflexión; son valores con identidades y conductas barriales que se tiñen de un color particular, son accionares que se mantienen en el tiempo y generan un acervo cultural reflejado en cada uno de los habitantes del Municipio. 

Esta forma de ver y sentir la ciudad, le da al Oeste características propias que marcan un distintivo respecto al resto del departamento, sin dejar de ser parte del mismo. Esto se ve reflejado en muchas peculiaridades, desde la forma de hablar, participar y discutir hasta la orientación del viento y ese hábito de caminar por la calle, aunque existan las veredas. 

Este rincón de Montevideo cuenta con sus costas agrestes, con el esplendor del paisaje en la cima de la Fortaleza del Cerro, que le da nombre a un barrio icónico, y una producción agraria que llena de orgullo a quienes forman parte de él. Las charlas turísticas, los lugares gastronómicos que resaltan lo mejor de la cultura culinaria nacional, los niños corriendo y jugando en las veredas. Todo eso y mucho más hacen de la zona un cimiento entre el pasado y el futuro de uno de los sectores más maravillosos de Montevideo.

Esta página tiene el cometido y la necesidad de explotar la belleza de este lugar, de mostrar y hacernos conocer por lo que fuimos, somos y seremos. Desde donde partimos y hacia dónde vamos, un Municipio que tiene identidad propia del que tú también formas parte. 

Aquí podrás encontrar patrimonio, identidad, cultura y turismo pertenecientes a esta parte de la ciudad que no todos conocen, por eso queremos ampliar esta oportunidad para todas y todos, vengas de donde vengas. 

¡Sin dudas el mayor patrimonio del Oeste son las personas que viven en él!